miércoles, 5 de marzo de 2014

PARTIDO correspondiente a la Jornada 22: C.D. JERICA - FOIOS ATLETIC C.F. 

   Tropiezo innecesario. Los precedentes marcaban punto negro el partido contra el Jérica. Un equipo que en su terreno solo ha perdido un partido...Daba mucho que pensar. Una buena racha de victorias abalaban la vuelta del Foios como aspirante. Cuando un equipo recupera efectivos es todo bastante más fácil. Pero la burbuja pinchó. Aún así, caer está permitido, levantarse es obligatorio.
   Hay posibles factores que dieron sentido al resultado del partido. Quizá exceso de confianza, terreno de juego en mal estado, colegiados condicionados, lances del partido..pero aun así, no hay excusas. Un partido son 11 contra 11 durante 90 minutos. Pase lo que pase, el resultado siempre debe ser favorable. En este caso no lo fue, perdiendo una gran oportunidad de mantener la buena racha. A pesar de todo, queda liga, muchos puntos por disputar, que deben caer en el saco blanqui azul. Ese es el objetivo, esa es la misión.
   El estado anímico de cada jugador sufrió una metamorfosis a lo largo de los 90 minutos que duró el lance: Partiendo des la felicidad inicial, a frustración, desespero, impotencia, irritación, para acabar en enfado colectivo. Enfrente un equipo que salió con el "rabo" entre las piernas en el campo del Foios, con un resultado desmesurado, que se creció ante las adversidades. Inicio fulgurante, donde ya se intuían las estrategias de ambos equipos en un terreno impracticable para desplegar fútbol. El equipo local tenia claras las consignas: presión al equipo rival, mediante balones largos a las espaldas de los defensas. Sin embargo el Foios no tenia tan claro sus ideas. Acostumbrado a poder entablar un diálogo con el esférico, esta cualidad quedaba totalmente imposibilitada debido al mal estado del terreno de juego.
   Una primera parte bastante intensa por parte de los 2 conjuntos. Tal vez el espectador creyese que estaba disfrutando de un partido de tenis en lugar de fútbol. El balón volaba de área en área. Llegadas tímidas del equipo local que apenas tuvo ocasiones de gol. Fue el Foios quien dispuso de 2 ocasiones para poder amarrar el partido. Una internada de Pepin desde la banda derecha, que llegando a línea de fondo, ejecutó un pase en paralelo a la línea de gol, sin apenas respuesta. Fugazmente paseó el cuero por delante de la porteria. Pasados unos pocos minutos, la otra jugada fue obra del Pelao, con una faena magistral. "Gambeteó" ante los defensas rivales que se le cruzaba en el camino, pero no pudo impactar con garantías el esférico, ejecutando un tímido disparo que acabó en las manos del portero. Citar la lamentable función tanto del entrenador como del segundo o ayudante, que protagonizaron un espectáculo digno de un circo. Insultos constantes tanto a jugadores como a aficionados, familiares de jugadores que simplemente presenciaban el encuentro. A falta de 8 minutos, el portero local cayó lesionado, lo que obligó a parar al menos más de 10 minutos el partido, cuando el equipo rival estaba consiguiendo acorralar al Jérica.
   La segunda mitad se esperaba más complicada que la primera. Pero no tanto. Tras retocar el equipo, el Foios pretendía marcar las pautas del encuentro de inicio. Fue el equipo amarillo quien se dedicó a este empeño. Primeras jugadas claras de llegada para el Jerica, haciendo trabajar más de la cuenta al portero Borja, que tuvo que atajar un par de disparos potentes. La tensión fue subiendo poco a poco ante un colegiado pésimo que no supo cortar a tiempo. Volaban codazos, patadas, una serie de agresiones sin juez capaz de mostrar cartulina. La consecuencia: desesperación visitante. Pasado 1/3 de la segunda mitad, el árbitro concedió pena máxima a favor del Jérica una jugada dudosa. El equipo amarillo se adelantaba en el marcador para júbilo de los aficionados locales. A partir de ahí, el partido desembocó en una especie de escenario teatral. Salidas de tono de algunos jugadores del Foios, jugadas enmarronadas, que no hicieron más que favorecer el resultado. Falta de experiencia? No se sabe. El problema, que todo eso ocasionó un descontrol, una locura colectiva que benefició totalmente el equipo local. En el fútbol debe predominar la inteligencia por encima de cualquier cosa. En los últimos compases del combate, el Foios dispuso de alguna tímida ocasión para poder conseguir un punto, pero en tímida se quedó.
   Lo que si podemos y queremos expresar es un enfado monumental. La falta de respeto a los jugadores es un síntoma de falta de educación entre muchas otras cosas. Insultar, ofender, deshonrar, ultrajar no es plato de buen gusto. Si proviene del propio entrenador rival, ayudante, etc... hace que pensar. Al final del partido ocurrieron escenas que no deben repetirse en ninguna ocasión. Escenas fruto del panorama vivido por parte de los personajes allí presentes. Nombrar la falta de escrúpulo, por decirlo con respeto, cuando al salir, ciertos "impresentables", se habían encargado de romper los retrovisores de los coches de jugadores del Foios.
   Agradecer y pedir disculpas a los aficionados que asistieron al "numerito" grotesco vivido el domingo. Prometemos una buena exhibición, pero siempre futbolísticamente hablando, este sábado en casa ante un buen equipo como es el Albuixech. Seguiremos trabajando para conseguir llegar lo más alto a final de temporada.